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Un anciano de mirada melancólica y perdida observa a través de una ventana, mientras la luz cálida del atardecer baña la habitación. Su reflejo, casi fantasmal, se dibuja tenuemente sobre el cristal. El rostro surcado de arrugas y la figura encorvada por el paso de los años se recortan entre sombras que proyecta la luz dorada del ocaso. Detrás, las paredes de colores suaves acentúan su soledad contemplativa. A través del ventanal, el cielo es un lienzo naranja donde el sol se despide. La imagen evoca la nostalgia y la belleza agridulce de la vejez., cinematic